martes, 28 de abril de 2009

El objeto más antiguo y lejano hallado hasta ahora en el Universo



El telescopio Swift de la NASA ha detectado una explosión de rayos gamma, provocada por el estallido de una estrella moribunda, que los astrónomos consideran el objeto más antiguo y lejano detectado hasta ahora en el Universo. El zambombazo cósmico tuvo lugar hace aproximadamente 13.000 millones de años, tan sólo unos 600 millones de años después del Big Bang, cuando el Universo tenía un 5% de su edad actual.

Las explosiones de rayos gamma son potentes descargas de energía que duran entre menos de un segundo y varios minutos. Estos fenómenos liberan enormes cantidades de energía en muy poco tiempo, y generalmente se producen tras el estallido de una estrella que se tranforma en un agujero negro.

La explosión de rayos gamma recién descubierta fue detectada por el telescopio Swift en la mañana del pasado 23 de abril. El estallido duró unos 10 segundos y se produjo en la constelación de Leo. De inmediato, varios telescopios terrestres realizaron un seguimiento del fenómeno, incluyendo el Very Large Telescope (Telescopio Muy Grande o VLT, por sus siglas en inglés), en Paranal (Chile) del Observatorio Europeo Austral (ESO) .

Las observaciones realizadas con rayos infrarrojos por el VLT, unas 17 horas después de que la explosión fuera detectada, permitieron a los astrónomos establecer la distancia a la que se produjo el estallido.

"Se trata de la explosión de rayos gamma más antigua jamás detectada, y también el objeto más lejano descubierto hasta ahora", asegura Nial Tanvir, el director del equipo que realizó las observaciones con el VLT, en un comunicado difundido por el ESO.

El estallido tuvo lugar cuando el Universo era aún muy joven, con una edad de unos 600 millones de años. Para hacerse una idea de la 'inmadurez' del cosmos en aquel momento, hay que tener en cuenta que las primeras estrellas se formaron cuando el Universo tenía entre 200 y 400 millones de años.

"Este hallazgo prueba la importancia de las explosiones de rayos gamma para explorar las zonas más remotas del Universo, explica Tanvir. "Ahora podemos confiar en que en el futuro se encontrarán estallidos incluso más lejanos, que abrirán una ventana para el estudio de las estrellas más primitivas y el final de la llamada 'Edad Oscura' del Universo", concluye este astrónomo.

lunes, 20 de abril de 2009

Nadal es cinco veces príncipe de Montecarlo



Demolition Man, Hombre Demolición. Esas dos palabras resumen el quinto Campeonato consecutivo de Rafael Nadal en el Montecarlo Country Club, lo que nadie ha hecho jamás. Dos palabras y el análisis de Nole Djokovic: "Volvemos a la historia de creer en ti mismo ésa es la clave cuando juegas contra Nadal: has de concentrarte en cada punto, porque hay un jugador al otro lado de la red que no va a regalar un solo punto". No cabe mejor descripción. El tremendo triunfo de Nadal sólo se concretó por la fuerza mental del número uno del mundo: y por ninguna otra cosa.
El Hombre Demolición firma ya cinco títulos seguidos en el lujoso escenario de la Costa Azul, gracias a una estampida de 28-0 en el Montecarlo Country Club desde su primera y única derrota aquí, en 2003, ante Coria. Van 21 triunfos consecutivos en arcilla, desde que perdiese en 2008 con Ferrero, en Roma. 23-1 en finales en tierra batida (sólo perdió ante Federer, en Hamburgo 2007). Además, y, en fin, Nadal es el primer número uno del mundo que alza el título en Mónaco desde Lendl, en 1988. Todo este asombro, todo este ensueño entre tanto perfume caro es realidad gracias a un ser demoledor que disfruta excavando trincheras entre sombras de tensión y ceniza ocre. Con Nadal no se ganan puntos: se combate cuerpo a cuerpo, trinchera a trinchera. Cuando los finos Murray, Djokovic o Federer llegan ante Demolition Man van a la mina, a sufrir como perros. Y acaban jugando a algo que no es exactamente un deporte, sino un combate, un castigo: entran en territorio Nadal.
En juego, Nadal se mueve entre dientes de sierra: tiene problemas con el servicio, que los buenos restadores le ametrallan con frecuencia, él mismo admite altibajos mentales y de concentración y, a veces, da la impresión de liarse en el juego de ataque. Si se le encorseta en el corral del revés, le cuesta salir con el paralelo, pero la derecha cruzada es una piedra, una lluvia pesada para el revés de los rivales, forzados a alzarse en suspensión.
A tope.
Nadal es un generador de tensión e intensidad constantes. Pero, en ese mundo de estrés, Demolition Man se mueve como nadie. No hay jugador de tenis lo bastante duro para derrumbar esa pared bronceada, cuyo libro preferido es La Ciudad de las Bestias, de Isabel Allende. Mira por dónde.
Tras repartir los dos primeros sets, el desenlace se gestionó en los dos juegos iniciales del tercero: con Nadal al saque, el primer juego duró 16 minutos. Rafa limpió tres puntos de rotura, uno de ellos con un contragolpe imposible en la red ("get", se dice en inglés) que hizo arrodillarse a Djokovic, quien rogaba al cielo, pedía ayuda a Dios: "Pomozi Boce", en serbo croata. El combate de trincheras fue excediendo los límites físicos de Djokovic, que se hundió en dobles faltas. Nadal se escapó, 2-0. Cuando el serbio ganó el tercer juego, lo celebró como si fuera el título. Con razón: Djokovic no ganaría un juego más. Nadal ya era el amo. Era su mundo: sombras, ceniza, tensión y estrés. "Estoy cansada de ser fuerte", susurra la hermosa Connie Nielsen a Russell Crowe en una emocionante escena de Gladiator. "Antes sonreías más", se alza el gran gladiador, entre lágrimas furtivas. "Este torneo siempre ha sido un sueño para mí, no esperaba ganar aquí", dijo Nadal cuando ganó: también estaba emocionado. Y el buen tenista Djokovic es como Oliver Reed, en esa buena película: un hombre del espectáculo. No basta ante la emoción de Demolition Man.

Djokovic
"Nadal es el dominador en esta superficie. Su ventaja en estas pistas radica en su fuerza y mentalidad. Otra vez me he quedado a un paso, sobre todo después de un increíble segundo set. Ojalá pueda tener otra oportunidad esta temporada. Jugué uno de mis mejores partidos contra él en tierra. Es una pena que no tuviera un poco más de paciencia".

jueves, 16 de abril de 2009

'Puede que Zapatero no sea muy inteligente…'




Nicolas Sarkozy no considera a José Luis Rodríguez Zapatero un tipo inteligente. Se lo dijo ayer en tono confidencial a los parlamentarios de la izquierda y de la derecha que recibió en el Elíseo. Estaban convocados para tener noticias de primera mano sobre la crisis del G20 y sobre los pormenores de la crisis, pero hubo lugar a otros suculentos particulares.

Especialmente cuando el jefe del Estado y los comensales se empleaban con los postres. Sarkozy sacó pecho entonces para celebrar ante los presentes que Zapatero le había copiado el proyecto de reformar la televisión pública, tal como hoy revela el diario 'Libération'.

-"El Gobierno español acaba de anunciar la supresión de la publicidad de las cadenas públicas. ¿Sabéis a quién han puesto de ejemplo?", se pregunta retóricamente Nicolas Sarkozy delante de los 12 senadores y los 12 diputados que asistían al almuerzo.

-"Pueden decirse muchas cosas de Zapatero", responde el socialista Henri Emmanuelli con solidario entusiasmo.

-"Puede que no sea muy inteligente", objeta Sarkozy. "Pero yo conozco a personas que eran muy inteligentes y que no han llegado a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales".
Naturalmente, el anfitrión se refiere a Lionel Jospin, adelantado por Le Pen en los comicios de 2002, aunque el mayor interés del párrafo entrecomillado concierne al modo en que el presidente francés cuestiona las luces del jefe del Gobierno español. Todo ello en un ambiente informal, relajado, y también extraordinariamente sincero, a decir de los presentes.

De hecho, Nicolas Sarkozy elogia durante los postres a Silvio Berlusconi porque el jefe del Estado francés le atribuye el mérito de haber obtenido un claro entusiasmo plebiscitario: "Lo importante de una democracia es ser reelegido. Mirad a Berlusconi. Lo ha logrado tres veces".

Dos veces, en cambio, ha sido elegido Zapatero, aunque el presidente español aparecía en la comida de ayer en los términos de un hermano menor. Sarkozy no lo considera muy inteligente. Y podrá explicarle sus razones en la visita de Estado que realiza a Madrid los días 27 y 28 de abril. Carla Bruni estará a su lado, quizá para aligerar tensiones o para contener las ligerezas que su marido a veces comete en las reuniones de machotes.

La de ayer, por ejemplo, puso en evidencia que Nicolas Sarkozy se observa a sí mismo como "maestro del mundo", tal como titula la información de 'Libération'. De otro modo no pasaría revista a sus colegas del escenario internacional. Incluido Obama, de quien Sarko tiene una opinión matizadamente positiva: "Es un espíritu sutil, muy inteligente. Pero sólo lleva dos meses elegidos y nunca ha gestionado un ministerio. Hay distintas cuestiones sobre las que todavía no ha expresado una opinión".

El egocentrismo del presidente francés también relativiza la importancia de Angela Merkel y convierte a la canciller germana en una suerte de gregaria francesa: "En cuanto se ha dado cuenta del estado de los bancos y de la industria del automóvil no ha tenido otra posibilidad que seguir mi posición", concluía Sarkozy delante de las señorías.

París, caput mundi.

jueves, 9 de abril de 2009

Barack, el Bárbaro




La editorial independiente de cómics para adultos Devil Due, publica en junio un cómic titulado 'Barack, el Bárbaro y la búsqueda del Secreto de los Estímulos', en el que narra, en versión épica, la búsqueda por el protagonista de la fórmula secreta para reactivar la economía de Estados Unidos en un mundo poblado de seres tan terribles como 'La Hechichera Hilaria', un travieso semidiós llamado Bill (marido de Hilaria) o el Dominador Boosh. "¿En quién puede confiar Barack, el Bárbaro?", se pregunta Due Devil en la publicidad del cómic. La respuesta, probablemente, en 2012.

sábado, 4 de abril de 2009

"Si Ian Curtis levantara la cabeza..."



El mismo día que una cuerda de tender la ropa partió la traquea de Ian Curtis para acabar con su vida en Macclesfield (Inglaterra), a miles de kilómetros de allí, en L'Eliana (Valencia), Jorge Martí, cantante de La Habitación Roja, descubría el pop gracias a una actuación de Santiago Auserón en el revolucionario programa infantil La bola de cristal. Era 1980. Jorge contaba ocho años. Ian Curtis se ahorcó a los 23, en la cocina de su casa, justo cuando su grupo, Joy Division, despegaba, y sin ser consciente de que se convertiría en el mito romántico del pop más influyente. La última noche de su vida, Curtis se puso su película favorita (la atosigante Stroszet, de Werner Herzog), eligió como banda sonora un disco de Iggy Pop (de título nada casual, The Idiot) y se colgó.

Anoche, en la sala Moby Dick, los dos, Jorge e Ian, se conectaron por la mejor vía posible, la de las canciones: La Habitación Roja interpretó enterito (10 canciones) y por orden, el primer disco de Joy Division, Unknown pleasures, una fiesta que sirvió para anunciar que el próximo 7 de abril se estrena en los cines Control, la estupenda película que sobre la agitada vida de Ian Curtis ha dirigido Anton Corbijn.

El público, que llenó la sala (unas 200 personas a nueve euros) se declaraba con el corazón partido: a partes iguales entre La Habitación Roja y Joy Division. Treintañeros compartían sudores con jóvenes seguidores de Joy Division con la lección bien aprendida. Como Pablo Martínez, de 19 años, y Pablo Chocrón, de 18. A los dos les faltaban unos años para nacer cuando su ídolo se suicidó. Visten con gabardinas sobre una percha escuchimizada y lucen flequillo. Clones de Ian. "Fue el gran romántico del pop, el más influyente. Sus letras son una revelación, un choque", dicen. Desde clásicos como The Cure o U2 a grupos actuales como Interpol o The Killers, todos reconocen que la música de los de Manchester les inspira. Epiléptico, esquizofrénico, bipolar y genial, Curtis pagó su precocidad en todo. En lo musical fue un incomprendido que se adelantó al alter-punk y al gotismo; en lo personal se casó muy joven y fue padre con sólo 22 años. Cuando falleció apenas podía vivir de la música: trabajaba en una oficina de empleo. Después de su fallecimiento, sus discos comenzaron a venderse a sacos y su leyenda se agigantó.

Allí arriba, los chicos de La Habitación Roja se mostraron escrupulosos con el homenajeado. Nada de iniciativas arriesgadas: las canciones tal y como las concibió Curtis. Lo más difícil fue adaptarse al particular tono vocal del mártir. "He tenido", relata Jorge después de la experiencia "que cantar mucho más grave. Pero creo que ha salido bien". La relación de La Habitación Roja con Joy Division es por contagio. El grupo reconoce que no fue muy fan de los de Manchester hasta hace unos años.

El concierto tuvo su nota de humor negro. Cuando el grupo terminó el último acorde del disco y enfiló el camerino, un grupo de espectadores coreó: "¡Que se ahorquen, que se ahorquen!". A algún curtismaniaco no le pareció bueno el chiste. La fiesta se cerró con una propina que no se incluye en el Unknown pleasures y que sin duda es su canción más famosa, Love will tear us apart. Fue emocionante ver a la sala entera bailar y corear la canción de principio a fin. Alguien dijo: "Si Ian Curtis levantara la cabeza y viniera a un local de Madrid, un martes y en 2009, lleno y coreando sus canciones... fliparía".